06 agosto 2012

Escritos





Me impacta ver como por momentos tengo la capacidad de escribir cosas copadas e interesantes con ganas y pasión...Incluso hasta pareciera que tengo talento en la escritura por unos instantes.

No es que me interese tener demasiado talento y cambiar vidas a la hora de leer mis escritos, pero un “che meli, esta bueno el blog!” es como un mimo a mi cabeza. 

Hoy leí que el señor Saramago dijo “no escribo para agradar, tampoco para desagradar” . y concuerdo plenamente con esto.  Yo escribo sin intención de que le guste al otro o no; escribo para calmarme, para decirle a mi cabeza que pare de hablar, para decirles cosas lindas a la gente que quiero, para poder escribir palabras que probablemente si quedan dentro mío me enfermarían mas de odio, de amor, de deseo, de tristeza o de lo que sea que las palabras enferman.

Por otro lado pueden pasar semanas sin poder agarrar un lápiz, o escribir tan solo una oración para darme cuenta que la inspiración no está ayudándome en el papel. …y pueden pasar semanas en donde mi cabeza no tiene nada para decirle al mundo.

Dejo que fluya, no lo puedo hacer mecánico, a menos que busque las herramientas para ello. Pero por ahora no es algo que me moleste…

Ya hable de mis siclos, cada vez son más claros… y mis escritos son parte de ellos. Hago lo que puedo cuando quiero.. Yo no escribo, es mi mano quien traduce a mi cabeza. Así me sale.. 



No hay comentarios:

Publicar un comentario